domingo, 9 de marzo de 2014

8-3-2014. Aprovechar el madrugón

8-3-2014

Aprovechar el madrugón

Así, sin saber cómo ni por qué me he despertado a las cinco y veinte de la mañana. Miny me había enviado un mensaje cinco minutos antes, así que le he contestado. Y enviándonos convocatorias de premios para artistas hemos pasado un rato. A las seis la he dejado irse a dormir, que igual se ha pasado otra noche en vela. Yo me he puesto a terminar de editar su secuencia. Al final si que le he quitado la música del principio, en el conjunto final esos primeros cinco minutos en plan videoclip no quedaban nada bien. He corregido todo el sonido lo mejor que he podido, pero no queda, ni quedará todo lo limpio que quiero. Estoy empezando a pensar en como mover el documental cuando esté terminado y haya pasado por La nit de l’art. Si quiero presentarlo a festivales y que tenga posibilidades, primero tengo que encontrar una productora que quiera apostar por el documental, y segundo que esté dispuesta a pagar un buen trabajo de posproducción tanto de sonido como de imagen. Pero para esto el conjunto del documental tiene que valer la pena, cosa que ya veremos. Como pieza para una instalación puede ser interesante, pero como documental en sí quizás no tanto. O en lugar de presentarlo a festivales de cine, enfocarlo a premios de arte en general y videoarte. Esta madrugada, una de las convocatorias que Miny me ha pasado es para hacer una expedición entre Helsinki y Riga durante tres semanas realizando un proyecto al momento. Creo que voy a aplicar. Sería una buena experiencia para continuar este trabajo y unas buenas “vacaciones” antes de ir al que podría ser un próximo destino en septiembre: Suiza.

Mientras tanto, sigo preparando el documental sobre el teatro. Después de editar, esperando que se exportara he comenzado a escribir un documento de Word con comentarios e ideas sobre las que el codirector del documental me había hablado en un correo. Al terminar de exportarse el vídeo, me he puesto la ropa de deporte y me he ido a correr un rato, que había salido un día magnífico. Después un poco de compra, que estoy viviendo de mis restos y de la comida de los demás, por ahorrar un poco este mes, que en mayo podría continuar el viaje y hacer una escala previa a Suiza: Leipzig.

Todo esta en el aire todavía, pero son dos posibilidades reales. A las doce he seguido con el documento de Word sobre el teatro. Lo he enviado dos horas y media más tarde todo lo completo y preciso que podía hacerlo con la poca información que tengo en mano todavía. Es normal, acabamos de empezar. He recomendado a Sofía como directora de fotografía. A las dos he comido con Miny mientras ella chateba con una amiga que le ha hecho una traducción de un texto del coreano al inglés para ponerla en el showcase. Le ha cobrado setenta euros por una página. Es excesivo y Miny tiene que pensarse hasta que punto traducirá más texto o no. La verdad es que ha escrito un poema muy bueno. Y si a Matthew también se lo ha parecido, es que es bueno de verdad. Más adelante quiere intentar publicar un libro que combine su trabajo plástico con los poemas. Entonces sería la editorial la que pagara el excesivo coste de la traducción.

Por la tarde, a las cuatro, Cristina ha venido a la habitación para que le hiciera la entrevista para el proyecto. La hemos hecho dos veces. En la segunda ocasión la he dejado sola en la habitación para que estuviese más cómoda. No he podido verla todavía, pero me ha dicho que ha quedado mejor la primera. Haremos magia con el montaje y quedará bien, al igual que ya hicimos con Kuno. Antes de salir me ha comentado un poco mejor su idea de hacer un video sobre ella trabajando, aparte del que le grabé para mi documental, y exhibirlo en su exposición cuando la haga dentro de dos años. Le he dicho que me envíe algunas ideas previas  y así poder escribirle un pequeño guión y empezar a trabajar. Se ha despedido con la posibilidad de hacer una cena por la noche. Le he dicho que se lo comentase a los del segundo piso, que yo se lo decía a los del primero.

Quería salir a dar una vuelta. Se lo he dicho a Miny y le ha parecido bien. Hemos ido hasta la East Side Gallery y hemos vuelto. Antes de la cena me he puesto un documental que hico Canal 9 sobre el teatro de mi documental. Era bastante plano, simple y televisivo. Se quedaba en la superficie de todo, y los que hablaban no hacían más que jalonar a los dueños del teatro y decir lo a gusto que se sentían. Esta claro que nuestro documental no va a ir por ahí, va a ser mucho más interesante a nivel narrativo y audiovisual. Eso sí, el documental de Canal 9 contaba con actores muy importantes hablando. Esperamos contar nosotros también con ellas.


 Le he comentado a Yunyi que cenara con mostros, pero no podía. El ordenador le ha borrado las dos últimas fotografías en las que trabajaba y tiene que volverlas a trabajar desde el principio y terminarlas cuanto antes.  Al final, en la cena hemos sido sólo Miny, Cristina y yo. Cristina ha hecho tortilla de patata, Miny tofu y yo patatas fritas y pan con tomate y queso. La conversación ha girado en torno a un galerista que se ha puesto en contacto con Cristina de una forma poco apropiada. Después ha llegado Matthew, y Miny le ha pedido que leyera su texto para comprobar si la traducción era buena. Matthew, además de alabar la sutilidad del poema, le ha dicho que su tipografía es muy buena y que continúe escribiendo. Eso nos ha llevado a hablar de artistas que trabajan en varias disciplinas. De ahí a David Lynch y Steve McQueen, que con el cine debe de ganar millones y ya no volverá al arte. Lo que me ha recordado una noticia de Yahoo que leí por la mañana y que decía los diez deportistas retirados que más dinero ganan y entre los cuales hay seis golfistas. Matthew, capaz de hablar con criterio de cualquier cosa, se ha puesto a destruir todo el concepto de deporte, reduciendo a éste al rugby, el inglés no el americano. Si se utiliza un vehículo, se puede practicar por diversión o por necesidad, se utiliza una herramienta o es un acto de defensa como la lucha, eso no es deporte. De ahí hemos pasado a lo que los griegos consideraban deporte. Y de ahí a la civilización egipcia. Por curiosidad le he preguntado si es de los que piensa que las pirámides las construyeron los alienígenas. Era una pregunta trampa, estaba claro que no, pero quería saber su razonamiento. Le gustaría pensar que el hombre fue capaz de eso, y que las catedrales también son enorme, especialmente me ha hablado de algunas británicas, y que requieren mucho más trabajo manual y dedicación que una pirámide, por lo que sí, las pirámides las hicieron los hombres en una era donde la esclavitud estaba la orden del día. Los egipcios y sus creencias para construir catedrales nos han llevado a hablar de la religión y de la biblia como la mayor obra de arte jamás creada. ¿Por qué al fin y al cabo el arte no sirve para abrir mentes y convencer a los demás de que cambien su personalidad por un mundo mejor?

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